100mg
Artritis reumatoide. Artrosis. Espondilitis anquilosante. Episodio agudo de gota.
50 mg /8-12 horas Máx. 200 mg/día.
Oral.
Advertencias: Las reacciones adversas pueden minimizarse si se utiliza la menor dosis eficaz durante el menor tiempo posible para controlar los síntomas. Se debe evitar la administración concomitante de ketoprofeno con otros AINEs, incluyendo los inhibidores selectivos de ciclooxigena- sa-2. Existe evidencia epidemiológica de que ketoprofeno puede asociarse con mayor riesgo de toxicidad grave gastrointestinal que otros AINEs, especialmente cuando se utilizan dosis altas. El riesgo de hemorragia gastrointestinal, úlcera o perforación es mayor cuando se utilizan dosis crecientes de AINEs, en pacientes con antecedentes de úlcera, especialmente si eran úlceras complicadas con hemorragia o perforación y en los ancianos. Estos pacientes deben comenzar el tratamiento con la dosis menor posible. Se recomienda prescribir a estos pacientes un tratamiento concomi- tante con agentes protectores (p.e. misoprostol o inhibidores de la bomba de protones); dicho tratamiento combinado también debería considerarse en el caso de pacientes que precisen dosis baja de ácido acetilsalicílico u otros medicamentos que puedan aumentar el riesgo gastrointestinal. Se debe advertir a los pacientes con antecedentes de toxicidad gastrointestinal, y en especial a los ancianos, que comuniquen inmediatamente al médico cualquier síntoma abdominal infrecuente (especialmente los de sangrado gastrointestinal), durante el tratamiento y en particular en los estadios iniciales). Se debe recomendar precaución a aquellos pacientes que reciben tratamientos concomitantes que podrían incrementar el riesgo de úlcera o hemorragia, tales como corticosteroides orales, anticoagu- lantes como la warfarina, inhibidores selectivos de la recaptación de serotonina (ISRS), agentes antiagregantes como la aspirina o nicorandil. Uso en pacientes de edad avanzada: los pacientes de edad avanzada sufren con mayor frecuencia reacciones adversas a los AINEs, concretamente perforaciones y hemorragias gastrointestinales, que pueden ser mortales. Si se produjera una hemorragia gastrointestinal o una úlcera en pacientes en tratamiento con ketoprofeno, el tratamiento debe suspenderse inmediatamente Riesgos cardiovasculares y cerebrovasculares: Se debe tener precaución especial en pacientes con antecedentes de hipertensión y/o insuficiencia cardiaca, ya que se ha notificado retención de líquidos y edema en asociación con el tratamiento AINEs. Datos procedentes de estudios clínicos y de estudios epidemiológicos sugieren que el empleo de AINEs distintos a la aspirina, especial- mente en dosis altas y en tratamientos de larga duración, se puede asociar con un aumento del riesgo de acontecimientos aterotrom- bóticos (por ejemplo infarto de miocardio o accidente cerebrovascu- lar). Al igual que todos los AINEs, se debe tener una consideración especial cuando se trate a pacientes que presenten hipertensión no controlada, insuficiencia cardiaca congestiva, enfermedad isquémica cardiaca establecida, arteriopatía periférica y/o enfermedad cerebrovascular no controladas, y esta misma valoración debería realizarse antes de iniciar un tratamiento de larga duración en pacientes con factores de riesgo de enfermedad cardiovascular (p.e. hipertensión, hiperlipidemia, diabetes mellitus, fumadores). Se ha notificado un aumento del riesgo de acontecimientos trombóticos arteriales en pacientes tratados con AINEs no aspirina para dolor perioperatorio en cirugía bypass coronaria (CABG). Se ha notificado aumento del riesgo de fibrilación auricular en asociación con la utilización de AINEs. Riesgo de reacciones cutáneas graves: Se han notificado muy raramente reacciones cutáneas graves, algunas mortales, en asociación con la utilización de AINEs incluyendo dermatitis exfoliativa, síndrome de Stevens-Johnson y necrólisis epidérmica tóxica. Parece que los pacientes tienen mayor riesgo de sufrir estas reacciones al comienzo del tratamiento: la aparición de dicha reacción adversa ocurre en la mayoría de los casos durante el primer mes de tratamiento. Debe suspenderse inmediatamente la administración de Orudis Retard 200 mg comprimidos ante los primeros síntomas de eritema cutáneo, lesiones mucosas u otros signos de hipersensibilidad. Enmascaramiento de los síntomas de infecciones subyacentes: Orudis puede enmascarar los síntomas de una infección, lo que puede retrasar el inicio del tratamiento adecuado y, por tanto, empeorar el desenlace de la infección. Esto se ha observado en la neumonía bacteriana extrahospitalaria y en las complicaciones bacterianas de la varicela. Cuando se administre Orudis para aliviar la fiebre o el dolor relacionados con una infección, se recomienda vigilar la infección. En entornos no hospitalarios, el paciente debe consultar a un médico si los síntomas persisten o empeoran. Precauciones: Los AINEs deben administrarse con precaución en pacientes con antecedentes de enfermedad gastrointestinal (colitis ulcerosa y enferme- dad de Crohn) pues podrían exacerbar dichas patologías. Al comienzo del tratamiento es necesario monitorizar cuidadosamente la función renal en pacientes con insuficiencia cardíaca, cirrosis y nefrosis, insuficiencia renal crónica, pacientes sometidos a tratamientos con diuréticos y particularmente pacientes de edad avanzada. En estos pacientes la administración de ketoprofeno puede producir una reducción del flujo sanguíneo renal, causada por la inhibición de las prostaglandinas y originar así una disfunción renal. Puede ocurrir hipercalemia, especialmente en pacientes con diabetes, insuficiencia renal o que reciban tratamiento concomitante con agentes promotores de la hipercalemia. En estas circunstancias se deben monitorizar los niveles de potasio. Como otros antiinflamatorios no esteroides se ha comprobado que el efecto antiinflamatorio, analgésico y antipirético del ketoprofeno, en procesos infecciosos puede enmascarar síntomas de la evolución de la infección como la fiebre. Deben evaluarse periódicamente los niveles de transaminasas en aquellos pacientes con determinaciones de la función hepática alteradas o con historial de enfermedad hepática, particularmente en los tratamientos a largo plazo. Se han descrito casos raros de ictericia y hepatitis con ketoprofeno. El uso de AINEs puede alterar la fertilidad femenina y no están recomendados en mujeres que están intentando concebir. En mujeres con dificultades para concebir o que están siendo sometidas a un estudio de fertilidad, se debería considerar la suspensión del AINEs. Los pacientes con asma asociada con rinitis crónica, sinusitis crónica, y/o poliposis nasal tienen un mayor riesgo a padecer alergia a aspirina y/o AINEs que el resto de la población. La administración de este medicamento puede provocar ataques de asma o broncoespasmo, particularmente en sujetos alérgicos a aspirina o a AINEs Si se presentan alteraciones visuales, como visión borrosa, el tratamiento debe interrumpirse.
Ketoprofeno está contraindicado en pacientes con antecedentes de reacciones de hipersensibilidad tales como broncoespasmo, agudizaciones del asma, rinitis, urticaria o cualquier otro tipo de reacción alérgica a ketoprofeno, ácido acetilsalicílico u otros AINEs. En estos pacientes se han notificado reacciones anafilácticas graves, raramente mortales Ketoprofeno está contraindicado en pacientes con hipersensibilidad al principio activo o a alguno de los excipientes incluidos en la sección 6.1. Ketoprofeno también está contraindicado en el tercer trimestre del embarazo. Ketoprofeno está también contraindicado en los siguientes casos: Ulcera péptica activa, o antecedentes de hemorragia gastrointestinal, ulceración o perforación relacionada con tratamientos previos con AINEs. Predisposición hemorrágica. Insuficiencia hepática grave. Insuficiencia renal grave. Insuficiencia cardiaca grave
Asociaciones no recomendadas Salicilatos a dosis elevadas y otros antiinflamatorios no esteroideos (incluyendo inhibidores selectivos de la ciclooxigenasa-2): La administración conjunta con ketoprofeno produce un aumento del riesgo de úlcera y hemorragia gastrointestinal. Anticoagulantes: aumentan el riesgo de hemorragia gastrointestinal. - Heparina. - Antagonistas de Vitamina K (ej: warfarina). - Antiagregantes plaquetarios (ej: ticlopidina, clopidogrel). - Inhibidores de la trombina (ej: dabigatran). - Inhibidores directos del factor Xa (ej: apixaban, rivaroxaban, edoxaban). Si la administración concomitante es inevitable, se debe monitorizar estrechamente al paciente. Los AINEs pueden aumentar los efectos de los anticoagulantes tipo dicumarínico Litio: La administración conjunta puede inducir aumento de los niveles plasmáticos de litio en ocasiones alcanzando niveles tóxicos debido a la disminución de la excreción renal de litio. Si es necesario, se debería monitorizar estrechamente la concentración plasmática de litio y ajustar la dosis de litio durante y después de la terapia con AINEs. Metotrexato a dosis superiores a 15 mg/semana: La administración conjunta con ketoprofeno produce un aumento del riesgo de toxicidad hematológica del metotrexato, en particular cuando éste se administra a altas dosis (> 15 mg/semana), posiblemente relacio- nado con el desplazamiento de su unión a las proteínas plasmáticas y con su disminución del aclaramiento renal. Asociaciones que requieren precauciones de uso Productos medicinales y categorías terapéuticas que pueden promover hipercalemia (es decir, sales de potasio, diuréticos ahorradores de potasio, inhibidores de la ECA y antagonistas de angiotensina II, AINEs, heparinas (de bajo peso molecular o no fraccionadas), ciclosporina, tacrolimus y trimetoprima). El riesgo de hipercalemia puede aumentar cuando los fármacos arriba mencionados se administran de forma concomitante. Diuréticos: Los pacientes y en particular en pacientes deshidratados en tratamiento con diuréticos, tienen un mayor riesgo de desarrollar fallo renal secundar- io a la reducción del flujo sanguíneo provocada por la inhibición de las prostaglandinas. Estos pacientes deben ser rehidratados antes de iniciar la administración conjunta y su función renal monitorizada cuando se inicie el tratamiento. Corticoides: Aumentan el riesgo de úlcera o sangrado gastrointestinales. Pentoxifilina: Hay un incremento de riesgo de hemorragia por lo que es necesaria una monitorización clínica más frecuente así como una monitorización del tiempo de sangrado. Inhibidores de la ECA y antagonistas de angiotensina II: En pacientes con la función renal comprometida (ej.: pacientes deshidrat- ados o pacientes de edad avanzada), la administración conjunta de un inhibidor de la ECA o antagonista de angiotensina II y agentes que inhiben la ciclooxigenasa puede ocasionar un deterioro adicional de la función renal, incluyendo posible insuficiencia renal aguda. Metotrexato a dosis inferiores a 15 mg/semana: Durante las primeras semanas de tratamiento conjunto, debe realizarse un recuento sanguíneo semanalmente. Si hay alteración de la función renal o es un paciente de edad avanzada, el control debe ser realizado con más frecuencia. Tenofovir: La administración conjunta de fumarato de disoproxilo de tenofovir con AINEs puede aumentar el riesgo de insuficiencia renal. Nicorandil: En los pacientes que recibieron conjuntamente nicorandil y AINEs, existe un mayor riesgo de complicaciones graves como la ulceración, perforación y hemorragia gastrointestinales. Glucósidos cardíacos: No se ha demostrado una interacción farmacocinética entre ketoprofeno y digoxina. Sin embargo, se recomienda precaución, especialmente en pacientes con insuficiencia renal, ya que los AINEs pueden reducir la función renal y disminuir el aclaramiento renal de los glucósidos cardía- cos. Ciclosporina: Incremento del riesgo de nefrotoxicidad. Tracrolimus: Incremento del riesgo de nefrotoxicidad. Asociaciones a tener en cuenta: Antihipertensivos (betabloqueantes, inhibidores de la ECA, diuréticos): Riesgo de reducción del efecto antihipertensivo (inhibición de las prostaglandinas vasodilatadoras por los AINEs). Trombolíticos: Incremento del riesgo de sangrado. Probenecid: La administración conjunta de probenecid puede reducir notoriamente el aclaramiento plasmático del ketoprofeno. Inhibidores selectivos de la recaptación de serotonina (ISRS): Incremento del riesgo de sangrado gastrointestinal
Las reacciones adversas que se observan con mayor frecuencia son de naturaleza gastrointestinal. Pueden producirse úlceras pépticas, perforación o hemorragia gastrointestinal, en algunos casos mortales, especialmente en los ancianos. También se han notificado náuseas, vómitos, diarrea, flatulencia, estreñimiento, dispepsia, dolor abdominal, melena, hematemesis, estomatitis ulcerosa, exacerbación de colitis ulcerosa y enfermedad de Crohn. Se han observado menos frecuente- mente la aparición de gastritis. Se han descrito las siguientes reacciones adversas que se presentan agrupadas según su frecuencia en: muy frecuentes (≥1/10), frecuentes (≥1/100, <1/10), poco frecuentes (≥1/1.000, <1/100), raras (≥1/10.000,<1/1.000) , muy raras (<1/10.000), frecuencia no conocida (no puede estimarse a partir de los datos disponibles) y según la clasificación de órganos y sistema de MedDRA. Las reacciones adversas siguientes han sido notificadas con ketoprofeno en adultos: Trastornos de la sangre y del sistema linfático: Raras: anemia hemorrágica Frecuencia no conocida: agranulocitosis, trombocitopenia, insuficiencia de la médula ósea, anemia hemolítica, leucopenia. Trastornos del sistema inmunológico: Frecuencia no conocida: reacciones anafilácticas (incluido shock). Trastornos psiquiátricos: Frecuencia no conocida: depresión, alucinaciones, confusión, cambios de humor. Trastornos del sistema nervioso: Poco frecuentes: dolor de cabeza, mareo, somnolencia Raras: parestesia. Frecuencia no conocida: meningitis aséptica, convulsiones, disgeusia, vértigo. Trastornos visuales: Raras: visión borrosa. Trastornos del oído y del laberinto: Raras: tinnitus. Trastornos cardiacos: Frecuencia no conocida: exacerbación de la insuficiencia cardiaca, fibrilación auricular. Trastornos vasculares: Frecuencia no conocida: hipertensión arterial, vasodilatación, vasculitis (incluyendo vasculitis leucocitoclástica). Trastornos respiratorios, torácicos y mediastínicos: Raras: asma. Frecuencia no conocida: broncoespasmo (particularmente en pacientes con hipersensibilidad al ácido acetilsalicílico y a otros antiinflamatorios no esteroideos), rinitis. Trastornos gastrointestinales: Frecuentes: dispepsia, náuseas, dolor abdominal, vómitos. Poco frecuentes: estreñimiento, diarrea, flatulencia, gastritis. Raras: estomatitis, úlcera péptica. Frecuencia no conocida: exacerbación de colitis ulcerosa y enfermedad de Crohn, hemorragia y perforación gastrointestinal, pancreatitis. Otros trastornos son: melena y hematemesis Trastornos hepatobiliares: Raras: hepatitis, elevación de los niveles de transaminasas, elevación del nivel de bilirrubina en sangre debido a los trastornos hepáticos. Trastornos de la piel y del tejido subcutáneo: Poco frecuentes: rash, prurito Frecuencia no conocida: fotosensibilidad, alopecia, urticaria, angioede- ma, reacciones ampollosas incluyendo el síndrome de Stevens-Johnson, necrólisis epidérmica tóxica, pustulosis exantemática aguda generaliza- da. Trastornos renales y urinarios: Frecuencia no conocida: insuficiencia renal aguda, nefritis tubulointers- ticial, síndrome nefrítico, alteraciones de los tests de la función renal. Trastornos generales y condiciones del lugar de administración: Poco frecuentes: edema, fatiga. Exploraciones complementarias: Raras: incremento de peso. Trastornos del metabolismo y de la nutrición: Frecuencia no conocida: hiponatremia, hipercalemia.
Se han notificado casos de sobredosis con dosis de hasta 2,5 g de ketoprofeno. En la mayoría de los casos, se han observado síntomas benignos y limitados a la aparición de letargo, somnolencia, náuseas, vómitos y dolor epigástrico. Tratamiento No existe un antídoto específico para la sobredosis. En caso de sospecha de sobredosis masiva, es recomendable un lavado gástrico y se debe instaurar tratamiento sintomático y de soporte compensado. Puede ser preciso monitorizar y mantener las funciones vitales compensando la posible deshidratación, vigilando la función renal y corrigiendo la acidosis, si aparece. El ketoprofeno ha mostrado ser dializable, por lo que si aparece fallo renal, la hemodiálisis puede resultar útil para la eliminación del fármaco circulante.
Primer y segundo trimestre de la gestación La inhibición de la síntesis de prostaglandinas, puede afectar negativa- mente la gestación y/o el desarrollo del embrión/feto. Datos procedentes de estudios epidemiológicos sugieren un aumento del riesgo de aborto y de malformaciones cardiacas y gastrosquisis tras el uso de un inhibidor de la síntesis de prostaglandinas en etapas tempra- nas de la gestación. El riesgo absoluto de malformaciones cardiacas se incrementó desde menos del 1% hasta aproximadamente el 1,5%. Parece que el riesgo aumenta con la dosis y la duración del tratamiento. En animales, la administración de un inhibidor de la síntesis de prostaglandi- nas ha mostrado un aumento de la pérdida en la pre y post-implantación y de la mortalidad embriofetal en animales. Además, se ha notificado un aumento de incidencias de varias malforma- ciones, incluyendo cardiovasculares, en animales a los que se les ha dado un inhibidor de la síntesis de prostaglandinas durante el período organogenético. Durante el primer y segundo trimestre de la gestación, no se debe administrar ketoprofeno a no ser que se considere estrictamente necesario. Si utiliza ketoprofeno una mujer que intenta quedarse embarazada, o durante el primer y segundo trimestre de la gestación, la dosis y la duración del tratamiento deben reducirse lo máximo posible. Tercer trimestre de la gestación Durante el tercer trimestre de la gestación, todos los inhibidores de la síntesis de prostaglandinas pueden exponer al feto a: Toxicidad cardiopulmonar (con cierre prematuro del ductus arterioso e hipertensión pulmonar); Toxicidad renal: disfunción renal, que puede progresar a fallo renal con oligo-hidroamniosis. Al final del embarazo, la madre y el neonato pueden estar expuestos a: Posible prolongación del tiempo de hemorragia, debido a un efecto de tipo antiagregante que puede ocurrir incluso a dosis muy bajas; Inhibición de las contracciones uterinas, que puede producir retraso o prolongación del parto. Consecuentemente, ketoprofeno está contraindicado durante el tercer trimestre de embarazo
Con prescripción facultativa. Manténgase fuera del alcance de los niños. Almacenar a temperatura inferior a 30°C. En su envase y empaque original. No sobrepasar la fecha límite de utilización que aparece en el acondicionamiento exterior.